martes, 7 de noviembre de 2006

Veintitantos...

Con veintitantos, empiezas a sentirte inseguro y te preguntas dónde estarás dentro de un año o dos, pero luego te asustas al darte cuenta que apenas sabes dónde estás ahora. Te empiezas a dar cuenta que hay un montón de cosas sobre ti mismo que no sabías y que quizás no te gusten.


También empiezas a darte cuenta que tu círculo de amistades es más pequeño que hace unos años y que cada vez es más difícil ver a tus amigos... por diferentes motivos; trabajo, estudios, pareja... y cada vez disfrutas más de esa cervecita que sirve como excusa para charlar un rato. Piensas en tu trabajo y quizás ni te acercas a lo que pensabas que estarías haciendo.... O quizás estés buscando algún trabajo y te asusta pensar que tienes que empezar desde abajo.... Y extrañas la comodidad de la escuela, de los grupos, de socializar con la misma gente de forma constante. Las multitudes ya no son tan divertidas, incluso te incomodan.

Tratas día a día de empezar a entenderte a ti mismo, sobre lo que quieres y lo que no. Ries con más ganas, pero lloras con menos lágrimas y con más dolor. A veces te sientes genial e invencible y otras... solo, con miedo y confundido. De repente tratas de aferrarte al pasado, pero te das cuenta que el pasado cada vez se aleja más y que no hay otra opción que seguir avanzando. Te rompen el corazón y te preguntas como esa persona que amaste tanto te pudo hacer tanto daño. O quizás te acuestas por las noches y te preguntas por qué no puedes conocer a alguien lo suficientemente interesante como para querer conocerlo mejor.

Mucha gente que lea esto se sentirá identificada... con "veintitantos" y a veces con ganas de volver a los 18. Parece ser un lugar inestable, un camino en tránsito, un reajuste en la cabeza... pero todo el mundo dice que es la mejor época de nuestras vidas y no tenemos que desaprovecharla por culpa de nuestros miedos...

Dicen que estos tiempos son los cimientos de nuestro futuro.


Sólo una frase, "Que no se nos pase"...

Anónimo, seguramente alguien rondando la treintena.

Saludos,
Nebrin

1 comentario:

Anónimo dijo...

Con taitantos te preguntas tantas cosas que la multitud de respuestas que se pueden dar seguramente triplique tus preguntas... Estoy deacuerdo con algo "que no se nos pase"... y aún más deacuerdo con que "cervecita que sirve como excusa para charlar un rato"... Posiblemente con taimuchos dejarás de preguntarte... Besos.